En este caso, vamos a revisitar las reglas que se usaron a la hora de aprender kotlin para empezar a aprender este framework y usarlo junto con kotlin.

Las entidades ya son harina de otro costal. Son más complejas y requieren de más cariño.

En el post anterior, os comentaba lo fácil que es agregar información al Enum. Aparte de contexto, podemos agregarle valores para darle funcionalidad.

Lo interesante de los Enum en Kotlin es que es muy fácil agregarle contexto.

Anteriormente, nuestro Value object validaba que el valor fuera el correcto. Pero usamos una excepción genérica, la cual sólo nos deja poner un mensaje. Esto puede estar bien, pero en el contexto de DDD no es del todo correcto. La idea es que a través de la estructura de carpetas y los ficheros que tenemos, podamos hacernos una idea del dominio.

Primer obstáculo, buscar y comprender el equivalente de Composer en Kotlin. En este caso tuve la suerte de contar con el IDE de Jetbrains (la versión community es suficiente) que te facilita la vida creando un proyecto de consola desde cero. En mi caso, tuve que usar la versión 16 de java por incompatibilidades con la 17.